De esta manera se coordinarán esfuerzos en el desarrollo de estrategias de protección mediante la generación de herramientas y modelos experimentales, la identificación y prueba de antivirales para el tratamiento del SARS-CoV2 o el desarrollo de anticuerpos para la protección frente a la infección. Además, varios grupos del centro trabajan en desarrollo de la próxima generación de candidatos de vacuna mediante la producción de virus no infectivos o proteínas del virus que sean capaces de inducir protección frente a la infección. Por otro lado, se realizarán investigaciones encaminadas a la caracterización molecular, estructural y funcional del virus aprovechando el potencial de nuevas infraestructuras del CNB como los criomicroscopios electrónicos de alta resolución y se afrontarán modelados computacionales para entender la propagación del nuevo coronavirus SARS-CoV2.
El ISCIII, el CNB-CSIC y otros centros de investigación han sido declarados infraestructuras sanitarias críticas por lo que permanecen en pleno funcionamiento para la investigación del COVID-19.
Los casi 30 millones para investigación forman parte del Real Decreto-ley de Medidas extraordinarias para hacer frente al impacto económico y social del Covid-19, aprobado por el Consejo de Ministros. Con esta medida, el Gobierno impulsa el desarrollo de los trabajos que ya están llevando a cabo los organismos públicos de investigación e infraestructuras críticas -que trabajan en coordinación con el Ministerio en los recursos que se necesitan-, y apoya la apertura de nuevas líneas de investigación para hacer frente al SARS-CoV2.
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